Grafointeriorismo íntimo. Mayra y Juan, frente a frente
Y ahora, vamos a ver qué nos dice las firmas de los protagonistas de nuestra Grafoboda. Vamos a descubrir su ‘yo’ más personal, más escondido. Ese que solo se muestra con los más cercanos. Pero donde una pareja se la juega. Vamos a descubrirlos en Grafointeriorismo íntimo. Mayra y Juan, frente a frente.
En los post anteriores, hemos visto que Mayra y Juan son sencillos. Mayra es más prudente en ambientes sociales, mientras que Juan es más lanzado. Sin embargo, sus rúbricas nos dicen que Mayra es mucho más optimista en las cosas que atañen a su vida privada.
Situaciones a las que se enfrenta con un punto de originalidad. Juan, es más impetuoso con la gente, en su trabajo. Pero mucho más comedido en su interior, con las personas que le importan. Interesante ¿No?
Mayra otorga mucha importancia a la palabra ‘aprender’, que escribe de forma clara, sosegada y contundente.
También sabemos ya que Mayra es una mujer mesurada, que se adapta bien a las circunstancias. Siempre observa con cautela y con rectitud de intenciones. El máximo exponente de esta manera de ser es la palabra ‘aprender’, que dibuja en el centro de su escritura. Y digo, ‘dibuja’, porque ‘no la escribe’. La perfila. La cincela.
Es el ejemplo más visible de que ella hace suya la filosofía de Antonio Machado: se hace camino al andar. Y lo hace de forma contundente. Especialmente, en todo lo que tiene que ver con su lado más físico y material. Este rasgo se observa en la prolongación de algunas letras hacia abajo.
Mayra forma un triángulo con sus firmas. No cabe mayor originalidad.
Pero, sin duda, el rasgo más llamativo de su firma, son ‘sus firmas’. Mayra rubrica hasta 3 veces. Y lo hace en un movimiento ágil, dinámico y lleno de brío. Sobre todo, en la firma que conforma el vértice más alto del triángulo.
Estamos ante una mujer con enormes deseos de afianzar su personalidad, su presencia y su criterio cuando está con los suyos- cuando está con Juan-. Mayra se impone dulcemente, con optimismo. Encuentra siempre el lado positivo de las situaciones y se supera a sí misma ante la dificultad. Y además, sabe llevar a Juan a su terreno, abrazándolo, como hace con el trazo envolvente de su rúbrica. ¡Tengo claro que Mayra celebrará la boda que ella quiera, tal y como la tiene en su mente!
La firma de Mayra es envolvente y coqueta. Se sale con la suya pero ‘dulcemente’.
Vamos con la firma de Juan. Dos trazos muy contundentes, bien presionados y con energía. Aquí tenemos de nuevo al hombre impulsivo y positivo que ya vimos en el post anterior. Pero tiene una particularidad. Su firma está bastante centrada.
Tomando en consideración el brío de sus trazos y el tamaño de la firma, esa centralidad denota más prudencia en su ‘yo’ íntimo. En las decisiones que tiene que tomar de cara a su vida más personal. Al entorno familiar.
La firma de Juan es contundente y muy grande, aunque centrada.
Fíjate en el trazo tan grande y hacia atrás que hace para escribir la ‘J’ de Juan. Prepara el terreno antes de lanzarse. ‘Toma carrerilla’ y va a por su objetivo.
El trazo inicial que hace Juan demuestra que prepara el terreno antes de actuar.
Observa ahora la ‘Z’ de ‘Muñoz’ de su apellido. Es un trazo redondeado, pero muy contundente. De nuevo tenemos ante nosotros el hombre que vamos conociendo. Impetuoso y decidido, pero que avanza con más cautela cuando se trata de cosas que afectan a su ‘yo’ más íntimo.
Juan remata su firma con un trazo muy rotundo, aunque sin restar amabilidad y dulzura.
Una cautela confirmada por el trazo invertido de la ‘J’ de Juan’. Algo que en Mayra, vemos que es todo lo contrario.
Juan es más desconfiado en su ‘yo’ íntimo que en su entorno social.
Mayra es más confiada en su ‘yo’ íntimo que en su entorno social.
¡Voalá! Aquí tenemos la confirmación de todo cuando sabemos de esta pareja a través de su letra. Mayra y Juan son el yin y el yang. Se complementan perfectamente, en su espacio social y cuando están uno frente a otro.
Vamos a traducir toda esta información en ideas para organizar una boda maravillosa. Mayra es práctica y original. Le vamos a proponer una boda sencilla, con elementos que le den un toque singular, que le otorguen un punto ‘diferentemente sosegado’. Juan es impulsivo y optimista. Así que le proponemos un ambiente acogedor y sin excesos, con un punto ‘razonadamente emotivo’.
Mayra y Juan son amantes del mar… y ahí discurrirá su boda.
Te espero en el próximo post, donde te mostraremos la propuesta para la Grafoboda de Mayra y Juan, una vez que conocemos la personalidad de ambos, a través de este Grafointeriorismo para 2, que hoy llamamos, Grafointeriorismo íntimo.
Grafointeriorismo íntimo. Mayra y Juan, frente a frente
Y ahora, vamos a ver qué nos dice las firmas de los protagonistas de nuestra Grafoboda. Vamos a descubrir su ‘yo’ más personal, más escondido. Ese que solo se muestra con los más cercanos. Pero donde una pareja se la juega. Vamos a descubrirlos en Grafointeriorismo íntimo. Mayra y Juan, frente a frente.
En los post anteriores, hemos visto que Mayra y Juan son sencillos. Mayra es más prudente en ambientes sociales, mientras que Juan es más lanzado. Sin embargo, sus rúbricas nos dicen que Mayra es mucho más optimista en las cosas que atañen a su vida privada.
Situaciones a las que se enfrenta con un punto de originalidad. Juan, es más impetuoso con la gente, en su trabajo. Pero mucho más comedido en su interior, con las personas que le importan. Interesante ¿No?
Mayra otorga mucha importancia a la palabra ‘aprender’, que escribe de forma clara, sosegada y contundente.
También sabemos ya que Mayra es una mujer mesurada, que se adapta bien a las circunstancias. Siempre observa con cautela y con rectitud de intenciones. El máximo exponente de esta manera de ser es la palabra ‘aprender’, que dibuja en el centro de su escritura. Y digo, ‘dibuja’, porque ‘no la escribe’. La perfila. La cincela.
Es el ejemplo más visible de que ella hace suya la filosofía de Antonio Machado: se hace camino al andar. Y lo hace de forma contundente. Especialmente, en todo lo que tiene que ver con su lado más físico y material. Este rasgo se observa en la prolongación de algunas letras hacia abajo.
Mayra forma un triángulo con sus firmas. No cabe mayor originalidad.
Pero, sin duda, el rasgo más llamativo de su firma, son ‘sus firmas’. Mayra rubrica hasta 3 veces. Y lo hace en un movimiento ágil, dinámico y lleno de brío. Sobre todo, en la firma que conforma el vértice más alto del triángulo.
Estamos ante una mujer con enormes deseos de afianzar su personalidad, su presencia y su criterio cuando está con los suyos- cuando está con Juan-. Mayra se impone dulcemente, con optimismo. Encuentra siempre el lado positivo de las situaciones y se supera a sí misma ante la dificultad. Y además, sabe llevar a Juan a su terreno, abrazándolo, como hace con el trazo envolvente de su rúbrica. ¡Tengo claro que Mayra celebrará la boda que ella quiera, tal y como la tiene en su mente!
La firma de Mayra es envolvente y coqueta. Se sale con la suya pero ‘dulcemente’.
Vamos con la firma de Juan. Dos trazos muy contundentes, bien presionados y con energía. Aquí tenemos de nuevo al hombre impulsivo y positivo que ya vimos en el post anterior. Pero tiene una particularidad. Su firma está bastante centrada.
Tomando en consideración el brío de sus trazos y el tamaño de la firma, esa centralidad denota más prudencia en su ‘yo’ íntimo. En las decisiones que tiene que tomar de cara a su vida más personal. Al entorno familiar.
La firma de Juan es contundente y muy grande, aunque centrada.
Fíjate en el trazo tan grande y hacia atrás que hace para escribir la ‘J’ de Juan. Prepara el terreno antes de lanzarse. ‘Toma carrerilla’ y va a por su objetivo.
El trazo inicial que hace Juan demuestra que prepara el terreno antes de actuar.
Observa ahora la ‘Z’ de ‘Muñoz’ de su apellido. Es un trazo redondeado, pero muy contundente. De nuevo tenemos ante nosotros el hombre que vamos conociendo. Impetuoso y decidido, pero que avanza con más cautela cuando se trata de cosas que afectan a su ‘yo’ más íntimo.
Juan remata su firma con un trazo muy rotundo, aunque sin restar amabilidad y dulzura.
Una cautela confirmada por el trazo invertido de la ‘J’ de Juan’. Algo que en Mayra, vemos que es todo lo contrario.
Juan es más desconfiado en su ‘yo’ íntimo que en su entorno social.
Mayra es más confiada en su ‘yo’ íntimo que en su entorno social.
¡Voalá! Aquí tenemos la confirmación de todo cuando sabemos de esta pareja a través de su letra. Mayra y Juan son el yin y el yang. Se complementan perfectamente, en su espacio social y cuando están uno frente a otro.
Vamos a traducir toda esta información en ideas para organizar una boda maravillosa. Mayra es práctica y original. Le vamos a proponer una boda sencilla, con elementos que le den un toque singular, que le otorguen un punto ‘diferentemente sosegado’. Juan es impulsivo y optimista. Así que le proponemos un ambiente acogedor y sin excesos, con un punto ‘razonadamente emotivo’.
Mayra y Juan son amantes del mar… y ahí discurrirá su boda.
Te espero en el próximo post, donde te mostraremos la propuesta para la Grafoboda de Mayra y Juan, una vez que conocemos la personalidad de ambos, a través de este Grafointeriorismo para 2, que hoy llamamos, Grafointeriorismo íntimo.